lunes, 29 de enero de 2018

FLUJOS REPRESADOS

A la inmaculada santidad de tu altar alzaré mis devociones y plegarias
Desde el suelo florido que pisa la nobleza de tus pies de muñeca aprincesada
Ondulando en nubes de inciensos y mirras humeados al fuego de mis ruegos
Llegarán hasta el aliento de tus signos salvados por los dioses de tus cerros,
Cumbres y montañas inalcanzables para el súbdito de rodillas ante sus vuelos
Halconesa de estratos nubelares superados, impulso torrente de mis ilusiones
Derrámense las bendiciones de su voluntad sobre la suerte de mis ansiedades
Asidas al capricho hormonal de tus flujos, represados contra la dicha de amar.


sábado, 20 de enero de 2018

VESTIDA DE LUMBRES

Vestida de lumbres siderales
Feraces los prados de tu nombre
Brotarán inflorescentes al otoño
Relucido en poesías encarnadas
En letras de tus versos rutilantes
Encendidos de rojos torrenciales
Hirvientes, de tu sangre en avalancha
De sensuales humores, hormonales
Embravecidas pasiones aborígenes
Derramadas a lo crudo del furor
Endosados a las noches y al amor.


  

DUELO POR EL AGUILA Y MIS HIJOS

Soy de pocas confesiones
Sin embargo ante mis hijos
Que a veces traje a castigos
Por traer de aves pasiones
En sus tristes corazones
Les confieso hoy mis duelos
Con tristeza en sus desvelos
Por su cernícalo hoy muerto
Por el tiguerazo experto
No habrá sancocho con pelos.

miércoles, 17 de enero de 2018

CLARALUZ (LA GRINGA)

Don Benhamin Saint Pletown, dominicano, es hijodescendiente de obreros contratados y traidos desde las Antillas Menores por la industria azucarera establecida en la región oriental de la República Dominicana.

Adquirió de los mulatos dominicanos el acendrado complejo de despreciar en forma de fobia patológica, el menosprecio a aceptar sus orígenes haitianos al tiempo que a los mismos nacionales haitianos que llegaban durante todo el año a incorporarse a las tareas peor remuneradas, como ha sido siempre, el corte, recolección y transporte de la caña.

Buscando alejarse cuanto pudiera de la marca africana que significaba su piel de morigerado color pardo obscuro, decidió lanzarse tras la conquista de una joven prostituta de origen cibaeño, propiamente de Canca la Reina, uno de esos santuarios dominicanos ubicados en las faldas de la Cordillera Septentrional, donde reside una etnia de orígenes canarios, casi intocado por el muletaje sincrético, español-africano-taino, que caracteriza la gran dominicanidad racial.

Una de las niñas nacidas de la unión marital entre el mulato Benhamin y su perlada joya recién adultada, fue bautizada como Claraluz a quien, dada su apariencia marcada como niña que "parecía gringa", de inmediato fue apodada "La Gringa", creció aprendiendo el miedo a todo lo que de modo alguno fuera asociado a alguna labrantía que implicara las manos de algún africo-haitiano.

Así fue como desde sus primeros años sufrió un proceso de aguda desnutrición, dada la rotunda patología obsesiva que la hacía vomitar todo alimento que de algún modo se enterara ella que pudo haber pasado por manos haitianas. Lo primero que aprendió a rechazar a pena de síncope si llegaba a enterarse que algún alimento lo contubiera, fue el azúcar parda de la que muy temprano se enteraría que procedía de la caña de azúcar que cultivan, cortan, recogen, transportan, muele y se produce valiendo la mano haitiana.

Como, a modo de juego, fue aprendiendo a rechazar los tubérculos, el café, el chocolate, el arroz, los aguacates, los huevos y pollos de granjas, la carne de cerdos de granjas, la salsa de tomates, los melones, las bangañas, los plátanos y sobre todo los alimentos expendidos a cielo abierto   través de todo el territorio nacional. Su dieta regular, bajo advertencias y promesas, muchas veces mentidas, se componía de frutos criados o cultivados en el propio patio de su casa.

Bajo este manto de asfixiante traumatismo le llegó la adolescencia y era noticia en su escuela que su excentricismo la mantenía muy aislada a pesar del comprometido gasto que asumia su familia pagando para su educación un colegio de niveles económicos bastante distanciados de su familiar tradición propia de la clase media baja a la que pertenecía su familia. Ningún muchacho con rasgos morenos que pudiera asociarse al origen haitiano, era parte de su círculo de cercanías.

Pronto le picó el gusanito que contagia actividad hormonal de la adolescencia. Su padre, consciente de que el asunto no parecía nada sano, decidió contratar una experimentada profesional de la psicología medico-neuro-social, especialidad en boga desde hace solo un lustro. El rompecabezas no hizo esperar el anochecer para desatarse en estallido. 

A medida que su ciclos terapéuticos avanzaban, la adolescente se enteraba, cada vez de modo más explícito, que el compromiso de la participación de las manos de la obrería haitiana en su país, comprometía los alimentos y fertilizantes con los que se cultivaban y crecían sus frutos y gallinas en pleno patio de su propia casa del mismo modo que sus vestidos exteriores e interiores, y calzados, habían sido confeccionados a manos de obreras haitianas.

El listado incluía sus cosméticos, frutos y alimentos enlatados. Su gravedad, a titulo de pánico incontrolable explotó cuando se enteró de que el agua con la que se duchaba, bajaba de unos charcos ubicados entre montañas en los que suelen bañarse todo el día recuas y montadores, todos labradores haitianos dedicados a hacer producir las cordilleras y vallles.

A la Doctora en Psicología contratada tentadora de una docena de títulos, sumados estos, a  medio siglo de prácticas sociales profesionales y académicas, contratada a costos casi impagables por el desesperado padre, esa tarde, abultó los buches y tras un resuello como de  bálbula de caldera, se le oyó decir: tiro la toalla y descuelgo todos estos papeles, me rindo.

El asunto no terminó allí, la brillante y reconocidísima profesional, investigadora certificada del Professional Board Psicology of Asian-America-Europe, quien habría llegado de sus ultimos entrenamientos practicados en Swatzilandia, Africa del Sur, terminó refiriendo su paciente al Lòd Sipwèm Nan Geri Mantal. Muy poco fue logrado en favor de sus traumatismos.

La niña, superó su adultez, sotera aun, no ha logrado hallar aun un mozo dominicano que no le huela a haitiano, aunque la llevan de vacaciones donde sus abuelos de Canca la Reina, resulta que allí ya todos los mozuelos se han matizado como mandó Dios y todos traen el hatiano en sus medidas corporales.

lunes, 15 de enero de 2018

A TUS OJOS

Luceros eternos que amanecen las madrugadas de mis melancolías
Reto a las profusas alegrías y sinfonías silvestres de la primavera
Son tus ojos, furiosas flechas en llamas corregidas al divino azar
Perlas disparadas como rayos, fijos en los reguardos de mi alma
Una risa, una sonrisa, un beso, al candor de solo escogidas palabras
Temblor de unos labios congelados bajo el susto del frío incierto
Niña encarnada de mujer en vuelos de primorosos aromas y colores
Poema hormonal de adolescencia que estalla en humores y salivas
De olores y rumores sexuados, quebraduras de pasos y caderas
Silueta empinada de espaldar y pechos de estrenada inflorescencia
Alma de fuente natural, naciente arroyuelo que fluye a mojar la raíz
De la vida y sus ascensos divinales al resplandor puro de tus ojos
Transparentes, llovidos de pasiones tan vírgenes como tu vientre.





viernes, 12 de enero de 2018

AL ABRIGO DEL OTOÑO

Ala abrigo del otoño, bañado de soles rojos
Al paso militar de capitulación por retaguardia
Nubosos temporales advierten ya los albedos
Doblegados de iluminadas otredades claras
Arrastro los fardos rocosos de mis pecados
Sobre las ruedas desvencijadas de mi carreta
Vuelan los caminos pardos, rojos y amarillos
Crecen con sus brisas los fríos de las tardes
Todos los mantos resignados bajo esta guerra
Cubren las últimas lágrimas de este otoño
Concedido de paz y perdones legionarios
Sin otro galardón que el gris de unos versos
Otoñeros, sin arcoiris, bodas ni principados
Me aferro sobrevivo a remo y tronco
Esperando atracar a orillas de tu puerto. 
LOS SIGNOS POETICOS DE LUIS CARVAJAL


Transformada  en signos, Laplace en la poesía

Gira sobre los ejes creadores de Luis Carvajal

Jugador de apuestas al arte de la ciencia y el amor

Entre conjeturas de inciertos, indeterminados y dudas

Derivadas de retos mortales y triunfos redivivos

Celebrados a costo de nuevos teoremas complejos

Respiración calculada por monstruos y dioses

Conjunto de poder y certidumbre de lo perfecto

Bajo curvas de áreas exactas posibles pero irracionales.

Figuras de la carne irreverente, inevitables cortes del cono

Dibujados al arte y perfección de Los Olimpos

Funciones de senos elípticos, parabólicos e hiperbólicos

En números y versos proporcionados a la carta de Dios

Perfección de lo exacto y verdadero  al filo de la razón.

Del piso al cielo, de sus pies a la mirada multiplicada

Sensualismo de imanes encarnados bajo la piel

Lucida de brillos húmedos y párpados mojados

Una vez y siempre despierta y dormida a la misma vez

Compelida  a luchar contra lo incierto de unos saltos

Ondulantes y profundos a valor de densos infinitos.

Doblez  renegada, maldición de lo impuro e inconverso

Todo ha de caber en el mundo transformado de Fourier

Y otras bestias cósmicas,  orates,  saurios gigantescos

Sin huecos abismales imaginados, continuos, exactos. 

Complejidad desnudada comisura por comisura

Besos enchumbados sin dejar muertos espacios

Espacios concluidos sin asíntotas  indeterminadas

Todo arreglado al sesgo de unos versos por números

Cuando nada parece asustar sr terrible voluntad

Sin límite inferior para el sub-infinito de un diferencial

Armonías, cuerdas y vibraciones en sinusoides

Retozan como poetas jugando a ruletas multicolores

Lúdicos ritos a ritmo de fantasía de orugas y poesías

A pesar del tiempo, la materia y sus signos, la pasión

Nos agota el aliento, arde la sangre a casi la muerte. 

Poema de carne y soplo,  número incierto, todo y nada

Mujer y poesía, espacio y pensamiento lo contraen

A igualdades transferidas, negaciones esenciales

Teorías y sin razones, Sin razones lógicas pero vivas

Teorema de mujer, vida y muerte lee mi contracanto

A Luis Carvajal, contrapunteado y contradicho .

No es posible rearmar su cuerpo fraccionado

Ni moldear sin romper las infinitas cuerdas que la esencian

Ni reducir a fórmulas o tropos la fuerza que la anima.

Ni doblegar su alma con el yunque o el beso

Ni acallar su sonrisa con el puño o la ira.

Cada ecuación o verso es un fracaso

Cada mujer es vida y es su vida Infinita y total

Cierta y negada

Cada mujer es toda explicación, toda poesía

Toda ecuación que siendo se valida

Toda verdad y toda perspectiva.

Cada mujer es siempre un desafío

Cada mujer es dios y es ella misma.

jueves, 11 de enero de 2018

JAQ Y LOS DIOSES

Sabes, Jaq, tus abuelos, allende los océanos, determinan por los astros
Realizan las conjeturas de los sueños y ordenan los convenidos finales
He sido convenido por los designios divinos para hablar con deidades
Morenas como las mujeres signadas por lunares al centro de su frentes
Jaq, a veces los dioses deciden fijar lunares eternos en ciertas princesas
Las escogen por donosas, distintas, determinadas para ascender a diosas
Hoy se que fuiste destinada a ser termplo reservado al cuidado de rutas
Trazadas en cartas y destinos de los astros, sus luces y temblores azules
Jaq, quisiera encontrar en esas cartas las rutas que llevan hasta tu portal.

miércoles, 10 de enero de 2018

A TUS ALTAS GRACIAS

Tan altas gracias habidas en horas de alto volar
Nos impiden mirar la preñez de las nubes del cielo
Siendo tan altas e inmensas traen su humedad al suelo
Siempre sabias,, siempre puras, siempre bajan hasta el mar

Donosas traen la vida, aves, flores y hasta el alma
Divinal de los poetas cuando cantan a la lluvia
Mientras la tristeza enamorada en lágrimas efluvia
Gaviota y halcón, águila y cóndor, nuestra reina palma

Hijos de las aguas, hilos y murmullos claros, verdes
Descienden de sus montañas, aun sus brisas rebeldes
Poderosas doncellas amadoras, jamás soberbias

Eternales sinfonías encantadoras, traen las olas
Tilinar de rocío coalescido en notas de pianolas
Agua de cirros, plumón de nubes, ternuras de ciervas.

lunes, 8 de enero de 2018

SABÍAS, JAQ ?

Sabías, Jaq, que a los poetas les fluyen corrientes de fantasías?
Disfrutan sus paranoias vueltas realidades de creación divinal
Sabrás de los deseos férvidos que suceden como las oraciones?
Oyeme, Jaq, deseo mirarte, oír tu silencio decir sin decir nada
Oler tu aliento aun a distancia de tu presencia posible, remota
Así, como los niños logra la magia de darles vida a sus juegos
Te imagino hablando de la lluvia. los verdes y flores de plantas
Sus difuminados colores a través de las nieblas irisadas de sol
Jaq, los poetas imaginan como locos sus inverosímiles locuras.





miércoles, 3 de enero de 2018

HOY DE NUESTRO SIEMPRE

Amo el recuerdo de tus besos, tus labios y cielo bucal
Tus senos, tu piel y tu nueva virginidad
Amo tus temblores y espasmos, tu voz y tu mirada
Quiero abrazarte fuerte, escuchar tus historias
Tus jadeos y tus tiernos quejidos de dolor
Quiero amarte profundamente, sentirte vibrar
Una y otra vez y varias veces más
Quiero amarte con mis manos, mis piernas toda mi piel
Cubrirte con toda mi envergadura tu tierna silueta
De nuevas formas y nuevos bríos
Te quiero más y más te quiero, siempre te quiero más
Espero cerrar las distancias, espacios y todos los tránsitos
De mi existencia fundido en la materia de tus carne
Dilatarme entre tus respiro, ser alma de tus alientos
Descansados y tibios de tu vida alzada sobre la dicha
Universal de las batallas triunfadoras de tu espiritu
Guerrera siempre despierta, gigante vencedora
Estela celeste del aura divina que irradia las pasiones
De nuestros amores consumidos a plazos memorables
Intensos como llama, puros como el bien de ser felices
Nos amamos tanto ayer como el hoy nuestro de siempre.