sábado, 18 de agosto de 2012

HIMNO DEL PARTIDO (borrador)

Partido Revolucionario Social
Demócrata, signo y valor en los ruedos
Luz, deber,  todos los derechos al par,
Ciudadanos libres al poder alterno.

Con Dios por delante, somos el partido
Ideal  de Duarte, fuero y democracia
Plena libertad, fuerte en los principios
Pueblo en la batalla, supremo en la gracia

De las colusiones limpiar nuestro suelo

Tomados de manos, con la gente, vamos
República Dominicana, hogar y cuerpo
Lumbre, huerto, amor y paz, divino parto.

Fe, pura y firme, arma, triufo y esperanza

Razón de una historia, honrada en sus glorias
Opuestos al crimen tras sus enseñanzas
Nación digna, siempre viva en la memoria.

Contra los inicuos, libramos la lucha

Quisqueya adelante, Libertad y Patria!
Damos el impulso al pueblo que busca
Real Independencia con laurel y palmas.

Marchamos de frente sobre las mentiras

Fuego, yunque y golpe contra los serviles
Ponemos en marcha la rueda que gira
La paz honorable nos hace felices

Llegamos unidos contra las miserias

Justicia y futuro,  faros de la  vida
Tras La Patria Grande vuelan nuestras metas
Gente, luz del hacho, do las almas vibran.


viernes, 17 de agosto de 2012

ROMANZA DE UN VIAJE ATARDECIDO


Palabras escritas con el pensamiento tatuado en cada partícula del rojo de mi sangre


Cuentan y cantan los surcos tallados en la ruta inviolable de nuestras luces encendidas,


Desde el faro único de una meta inscrita en nuestras almas de emigrantes invencibles.


Navegaremos los  confines  del Universo guiados por esos rayos de eternidad


Vadeando tormentas durante las oscuras noches de un viaje a  distancias sin números


Sin relojes, astrolabios  ni  sextantes, sólo irá una brújula  orientada  hacia al amor y la vida


Nos guiará con el  índice de nuestras fantasías vivas en el alma de la  juventud del otoño


Viajaremos encumbrados como pájaros migradores con los sellos  puestos en las cartas del regreso


Nuestra será la piel mutua de nuestros abrigos  contra los  hielos y brisas desconocidos


Yo te serviré el aliento de mis respiros,  mis  brazos,  la redondez de mis días canecidos


Tú me servirás el pan de tu sonrisa, la miel de  tu voz, la ternura de tu fe sin condiciones


Armaremos de nuevo el futuro, construiremos los iglúes para el tiempo largo y sin luz


De la vida en la estepa agreste de los retos contra las nieves y montañas del desolado


Allí, siguiendo los desfases románticos de la luna enamorada, construiremos nuestra paz.