jueves, 26 de agosto de 2021

LA DEMOCRACIA: NOMBRE PRIMERO DE TODOS LOS SISTEMAS POLÍTICOS MODERNOS

 

Cierto. Muy cierto es que el pensamiento cultivado al amparo de sus tradiciones familiares y sociales, diseñaron y marcaron los tatuajes emocionales, sentimentales y culturales en general, de personajes de la historia del pensamiento político socialista, cultivado,  tallado y acendrado  en el antropomorfismo religioso y familiar de pensadores tan cospicuos  intelectualmente como Karl Marx, Hegel, Engel, Lenín, Stalin, Nietzsche, Kant y casi toda la pléyade de los más destacados constructores del socialismo. Sus ideales fueron forjados a partir de sus orígenes, generalmente proletarios, descendientes, por lo general,  de campesinos adosados a la piedad, la misericordia de la fe salvacionista de las tradiciones religiosas judías. 

Es ese sentimiento de bondad divinal del que parten los criterios de justicia, paz, perdón, piedad, misericordia y resignación. Es ese natural sentimentalismo humanizado bajo los valores establecidos como justicia social, predicada por la tradición abrahamista, traspasada así al cristianismo desde las bases bíblicas que descienden a su vez desde los libros y tradiciones importadas desde la antigüedad oriental. Es a partir de ese mundo de verdades místicas acendradas en las tradiciones pre-cristianas, de donde surge esa pasión por la justicia social, la igualdad espiritual, la divinización humana, es decir, la elevación sustancial del pensamiento por encima de la materia. 

Puede afirmarse, sin error ni dudas, que esos sentimientos moldearon desde lo más profundo de su biología social, esa inclinación al reconocimiento la igualación social como valor, deber moral, derecho y virtud divina. Puede afirmarse que esas tradiciones luchan y revolotean constantemente, hoy, tanto como en las tradiciones citadas inicialmente, como razón por la que se esgrimen practimente todos los discursos políticos de lo que desde hace algunos siglos, los griegos nos habrían legado como herncia de organización del poder.  

Mintiéndose y desmintiéndose, según los distintos momentos, todos los discursos políticos modernos, es decir de por lo menos los dos últimos siglos, practicados por todos  los dirigentes más importantes de la civilización muy mayoritaria de las sociedades humanas, suelen reclamar, defender, propiciar, elevar, cuando menos en su decir, la voluntad de guerrear a muerte en favor de alguna forma  los signos de la Democracia. Podemos afirmar que, sin contar con el absolutismo del Reinado Divino, todos las consejerías humanas tiende o intentan mostrar ese pronunciamiento sobre la justificación de los derechos servidos como valor humano de primera categoría social. 

La historia de las ideas políticas nos confirma que casi todos los pensadores de la modernidad, de la civilización interpretada como racionalidad científica, se nombran entre todos ellos mismos, como reiterados propiciadores de alguna forma de la denominación "La Democracia".

lunes, 23 de agosto de 2021

VERDADES ANTROPOGÉNICAS

 Cierto. Ciertísimo es que los procesos biológicos que compartimos, de los que somos composición material en esta cosmogonía universal, según nuestra interpretación comunicacional, cognocitiva, siguen el curso de una evolución permanentemente activa, con tendencias aparentes ante nuestros sentidos como obedientes al principio termodinámico natural, que nos vincula de forma ineludible al divinismo de la que los estudiosos de las propiedades de la materia dan en signar como Segunda Ley de la Termodinámica o Ley de Irreversibilidad Universal. 

Esta dispone el criterio cosmológico, universal, pretendido como absolutez material, de que ese definido ente natural, se define en un único sentido, ilimitado e irreversible, por cuanto, el crecimiento de la variable determinada como Cambio Entropía, es, desde la aceptación del paradigma científico, hasta hoy aceptado, como "positivo", es decir, siempre creciente, o, claramente, siempre en un único sentido. 

Ahora, bien, el hecho mismo de aceptar como válido, la existencialidad, la esencialidad de un principio, así, Universal, implica la aceptación o reconocimiento de un dominio, una autorización determinada la que la inteligencia humana, prtende como meta infinita, sin embargo, inalcanzable, inagotable, en función de cuyos acercamientos pretendería justificar su existencia misma como entidad material sublimadas hasta su entronización a otras cosmogonías no materiales.

 Esas aspiraciones dios-dadas (o dadas por Dios), han de considerarse, pensarse, complacer las que serían las más lógicas aspiraciones de la existencia material de los hombres y hasta de las demás formas materiales de la cosmología natural y espiritual. La inteligencia humana no alcanza a vivir sin dioses, porque Dios define su meta infinita.

En ese caso, como justo vale asimilarse en forma casi matemática, lógica, humana, bien podermos apostar que la versión filosófica de Friedric Nietzsche : "Dios ha muerto", bien merece ser descartada ante la evidencia irrefutable de que todas las formas de la materia viviente, tienden a alcanzar estadios de perfeccionamientos irreversibles, es decir, inclinados hacia la ontología del ser divinizado, es decir, la búsqueda constatante de ese pretendido perfeccionismo infinito, donde su propuesta procura llegar, donde solo está Dios, donde todos los hombres pretenden estar.   

domingo, 8 de agosto de 2021

COMUNIDAD SIN TORCIDOS

 Pésames y cumpleaños

Comunidad muy hermosa

La más bellísima cosa

Que en nada provoca daños

Limpia, de muy blancos paños


De vocación divinal

Por la pureza candeal

De sus voceros humanos

Con sus cantares cristianos

De dignidad purpural


Solo hay algunos ateos

Torcidos, medio quilvianos

Pero bien, nuestros hermanos

Que son del barrio los feos

Rayados, visten, de reos


Los dejamos  que hasta crezca 

Según a ellos les parezca

Por si luego se arrepienten

Dios perdone si lo sienten

Para salvación la pezca


Es este nuestro santuario

Regocijado arcajé

Bendecido por la fe

Sacrificios de calvario

Nuestro histórico prontuario


A Dios van nuestros servicios

Purísimos sacrificios

También algunos despojes

Por si algún demonio coges

Limpio queden los resquisios







martes, 3 de agosto de 2021

REPÚBLICA DOMINICANA: MERCADO INTERNO DE 22 MILLONES DE CONSUMIDORES

 Cualquier estudiante inquieto por acercarse a los conocimientos relacionados con La Economía Política del Estado Moderno, fácilmente comprende la relación o cociente implicado en los beneficios capitalizables en función directa a la producción y multiplicación beneficiada a partir de los rendimientos de la mano de obra  capaz de ser plusvaluada a través del intercambio monetario, siempre que la misma producción alcance a ser revertida mientras se retiene parte de su valor como ventaja capitalizable. 

En la medida que la multiplicación de esas ventajas capitalizables crezcan por encima de los equilibrios en los que se soporten esas ventajas netas, la sociedad que la sustenta, queda favorecida por  los aprovechamientos materiales propiciados por esa dinámica social. Sociedades económicas fundadas en la explotación económica de la mano de obra esclava, durante lo que se ha conocido como era de civilización humana siempre ha conocido ese ejercicio económico desde los primeros rudimentos de la cultura de las transacciones y los ahorros. 

Esa es la historia de la que partió la sociedad que dió origen al moderno capitalismo. La economía en la que se ha basasado lo que suele considerarse como riqueza de la Colonia Saint Domingue, regenteada por Francia, es la historia del aprovechamiento ultrarendido de la esclavización de medio millón de obreros. Es así como el crecimiento, luego del desmantelaiento del sistema esclavista francés, los restos benefician lo que que quedaría como Haití Español, que poco a poco pasa a ser favorecido por esa mano de obra semiesclavizada. 

Esa mano de obra masiva, por las mismas razones, según sigue beneficiando desde Africa, Asia, America Latina y medio oriente, al mismo modo de capitalización, es la misma que enriquece de forma extraordinaria, al sistema dominicano. A ningún estudioso profundo del sistema económico dominicano, se le ocurre detener seriamente el suministro de mano de obra en la que se sustenta la historia del crecimiento económico dominicano. 

El peso natural de la xenofobia, ha de seguirse incrementando, siguiendo los efectos lógicos, humanamente discriminatorios siguiendo las los parámetros trazados por las reglas de la evolución biológico-social, como ocurre en cualquier sociedad humana  y otras sociedades animales, sin embargo a cierta distancia de tiempo, la penetración y difusión interna, terminará, después de algunas crisis de violencia incrementando y allanando el natural mestizaje, impulsado desde corrientes internas como externas. 

El crecimiento económico y la transformación social propia de las circunstancias políticas dominico-haitiana, les pasarán por encima a las penas de Pelegrín Castillo, nos hagamos los pendejos o simplemente los cómplices de la verdad inevitable a pesar de los curas españolizados que desayunan chicharrones de haitianos.

Lo siento por los mulatos y mulatas que no se aceptan y se niegan a reconocerse como descendientes de esclavos importados desde Africa.

Ese mercado de 22 millones de consumidores, cuyo peso en la Economía del Estado Binacional Dominico-haitiano, gravita cada vez más en el crecimiento del Producto Comercial Bruto de su intercambio mutuo, amenaza en convertir esta isla en un proyecto de Estado economicamente explosivo, para el area de El Caribe y hasta de El Mundo.