No seré el más pretendiente
De retóricos halagos
Aunque no esté entre los bagos
Reconozco inteligente
Esa efusión tan ardiente
Con la que este muchachón
Nos entrega con fruición
Y denuedo su talento
Es ya este un monumento
Por la espinela pasión.
No seré el más pretendiente
De retóricos halagos
Aunque no esté entre los bagos
Reconozco inteligente
Esa efusión tan ardiente
Con la que este muchachón
Nos entrega con fruición
Y denuedo su talento
Es ya este un monumento
Por la espinela pasión.
Fue ya La Corte Suprema
De la Nación africana
Quien decdió esta semana
Liberarse de esa enema
Bien dejó al inglés su flema
No vendrán los policías
Que enviados por esas vías
Otra vez desde Inglaterra
Nos impostarán la guerra
Siempre igual que en otros días
Nos fue impuesta contra España
Por buena o mala razón
Aun nos hiera el corazón
Que fue impuesta con la maña
De envenenada guadaña
Británca fue la trama
De la saboreda fama
Llamada Restauración
Servida por Luperón
Bien sépalo, usted, mi pana
Lo quiera Alá que el ciclón
De Kenia, esos guardias nunca
Que esa misión quede trunca
De un malvado pelotón
Del reino inglés religión
No venga el Boko Jaram
Que se queden donde están
Sin que nos traigan sus líos
De sus pleitos con impíos
Los lleven a Afganistán.
Esta discriminación
Es letra amarga ya vieja
Valdrá poco alguna queja
Que más caliente el fogón
De los tiempos de Colón
Decimeros de las élites
Magnos, del Cosmos satélites
Regodeados de ser únicos
Libres de daños impúdicos
Virginales, santos, célibes
Nuestros versos de villanos
Son décimas de arrabales
De tamboras y atabales
Desconocidos fulanos
Del circo somos enanos
Aguas sin prisas, de arroyos
De verdecidos cogollos
Somos canto de cigarras
De las uvas y sus parras
De las ciguas y sus pollos.
No somos de esas noticias
Agentes de su razones
Melodías de sus canciones
Ni piel para sus caricias
Solo del Cielo estulticias.
Pero me inscribo en la cola
Tras de la falda de Lola
Mí tía que arma espinelas
Igual que mis dos abuelas
No soy escritor de estola.
La notícia Decimera
Nosotros, los hijos pecadores, condenados y consumidos por los ardientes infiernos
Dilatados en sensuales sudores y enrojadas pasiones, descubiertas a ras de lunas
De estrelladas ilusiones encurtidas en odres de vinos madrugados, a punto de sabor
Ebrios de colores y fantasías, de pensamientos espirituales, de poblaciones futuras
Revividos contra las alianzas de la eras ordinales, nos rebelamos, cuerpo a cuerpo
Salados nuestros humores, hervimos ahogados en la vida alzada sobre la breve noche
Que aun celebra nuestros últimos veranos, convertidos en otoños y sueños de primaveras
Cielos anunciados de oscuridad infinita nos ríen con eternal desdén, juntos acogidos.
Y....entonces crecieron las horas inundadas de melancolías, ansias y esperas resecadas
A la par se llenaron los estanques de nuevas razones avalzadas contra las grietas de los muros
Dioses y bendiciones permanecieron dormidos en sus lechos de comprimidos inviernos
Poemas adoloridos repujaron contra las palabras, penetraron retorcidos claros intersticios
Fluyeron sus líquidas virtudes, azogue asomado tras los hilados brillos de la verdad
De los ensuales asertos de tus palabras, juradas contra las dudas de un sórdido incierto
Vocabulario abierto al amor, a dichas conculcadas, suertes y culpas inconfesas
Parecieron cerrar las voces del corazón estremecido por condenas y amenazas
Sin embargo, sin remedos ni indeterminaciones, nos sabremos entremecidos por el amor
Por los días, por las noches, por las horas de nuestros fundidos instantes nos adoramos.
Le escribo a la ternura de tus vencidas palabras
Tan tiernas como la misma virginidad de tus caderas
Inexploradas como la inflamada turgencia de esas lunas
Gemelas encendidas, contra el solemne estallido de la pasión
Contra el grito santificado de un calor escondido a la verdad
De tus encantadoras carnes tremoladas, cimbreantes,
Humedal que inundara de dicha temlorosas lo mojados sustos
De voces salteadas. de inciertos determinios de nubosos tiempos
Primaverales, sin medidas ni cálculos sobre invisibles temporales
No contemplados, de huracanes imprevisibles, sorprendidos
Poemario cantado sobre las marejadas altas de tormentas
Destinadas a estrellar la nave contra arrecifes anochecidos
Sin faros encendidos, acallados lo cantos de diosas marineras,
Ahogados entre brumosas olas. Desvanecidas las lluvias
De los diluvios divinos, jinenes sobre las noches de los cielos
Seremos dioses reinventados sobre el amor del eterno final.
Reconvertir, facilitar y optimimizar procesos químicos, físicos y fisicoquímicos en utilidades bioquímicas funcionales, como arreglos dinámicos capaces de acumular y rendir respuestas inteligentes, mediante incontables caminos, etapas o pasos, obedientes a infinidad de probabilidades que sirven a los procesos biológicos de generación y existencia de la organización material que comúnmente reconocemos como inteligencia natural, sería, teóricamente, pasible de ser domeñada bajo controles del saber alcanzado desde la ciencia termodinámica, desde sus reconocidas reglas hoy conocidas, hasta el aprovechamiento inducido, digamos, artificalmente, desde una equilibrada sopa de elementos químicos convertidos en nutrientes imprescindibles y precisos, en estos momentos en los que la evolución de las ciencias va dandos pasos que parecen sugerir novedosas precisiones inteligentes, cada vez más agudas. Un salto hipotético, desde el cual, podemos imaginar una revolucionaria manera a partir de la cual, la ingeniería de los bioquímicos lograría un máximo aprovechamiento circular de las energías, poniéndose de frente al misterioso equilibrio del sistema universal pensado como función cerrada de entropía nula.
Escogió Quiko La Quema
La Vuelta por Guatemala
Se escapó de la refala
Del viejo cuento, la enema
Mediática, de la peña
Política, mal traída
Desgastada, perimida
Desde tiempos de Lilís
Un viejo cuento infeliz
De burra enferma sin brida
Ya el canal no es argumento
Quiera Dios que en La Frotera
No vuelva a armarse la guerra
Por patanas de cemento
Que no cuenta ya elemento
Que cierre la construcción
Ni pare la producción
De bananos ni hortalizas
Mientras se calman las brizas
Oiga Dios nuestra oración
Ya se diluyó Faride
Tal vez sea algún pelotero
Gran Liga de un ministerio
Moreno, dicen, no mide
Van por Ito Bisonó
Al parecer barajó
Tocaron a Luis Miguel
Toro Miura hijo de Hatuey
Mas, tampoco se arriesgó
Alerta, David Collado
Con disimulo y decencia
Dijo que por prudencia
Sería al momento un pecado
Dejar Turismo de lado
Cuentan que hasta a Milton Ray
Llamaron a oir lo que hay,
Curtido lobo, El Doctor
Se rescató y con honor:
Ese es un gancho, "compay"
Hablaron de Berenice
De Miriam y hasta a La Vice
La lengua de una serpiente
Deslizada entre la gente
Siempre a mi es quien me lo dice.
El instinto natural que dispone la obligada necesidad de asumir patrones, conducta propia desarrollada a través de la evolución como recurso vital que tiende hacia la perpetuación de los seres vivos, dentro del marco de las propiedades materiales, han inclinado hacia el desarrollo de la virtuosa inteligencia, como resultado de esa organización material de dinámica inagotable.
La vida, como un fenómeno más de los operados como consecuencia del orden del Cosmos, único como es, por tanto, es de naturaleza única, realidad que ningún religioso o ateísta, encontraría modo de negar o rebatir, cuando a partir de sus razonamientos o argumentos lógicos, prácticos o teóricos, quedan obligados, en cualquier caso, a adminitir, -por un lado-, que las leyes naturales, al acogerse al determinismo de la mechánica estadística, dejan sentada, en forma bastante clara que, tanto el presente como el futuro quedan determinados. Si, quedara otra alternativa, como la diosística, igualmente claro que el Dios único abrahamico, al resultar infalible en sus determinaciones, estas resultarían, sin discusión, posible un hecho determinado, previsto desde la divinidad creadora de voluntad única y poderosamente infalible, por cuanto, igualmente determinista. Lo demás no pasa de ser monte, culebra y superstición.
INCERTIDUMBRES Y NATURALEZA
Cierto, ciertísimo es, que cuando comenzaron a desarrollarse las conversaciones y discusiones desarrolladas por los estudiantes y profesores de física teórica relacionadas con las incertezas que parecieron contrariar, ayer,-desde mediado del siglo pasado-, como en pura verdad, tanto como hoy trastorna a profesionales, físicos, químicos, filósofos, biólogos, etc... ya los pitagóricos del medio siglo antes de la Era Cristiana, habian comenzado a envolverse en discusiones matemáticas que trataban sobre la inconmensurabilidad de ciertas medidas, operadas en la naturaleza.
Esas inconmensurabilidades, constituyen la escencia matemática en la que parece sustentarse la vida nebulosa de la Teoría Cuántica. La Naturaleza, se las arregla cómodamente, sin contraposiciones, sin dificultad, justamente, a partir de las incertidumbres atadas a las impresiciones de la mensuras y las probabilidades cuánticas, su secretismo estadístico nos crea problemas químicos los relacionados con los órdenes biológicos de moléculas afectadas por propiedades como las de los enantiómeros, los caprichos de las proporciones elegidas por algunas moléculas biológicas como las sintetizadas por algunas plantas y seleccionadas por los cuerpos de los animales como parte de su propia biología, al parecer, en forma tan caprichosa, que otras moléculas complejas como las de las enzimas, viriones, virus, priones, etc., sin embargo, no parecen tener dificultad en distinguirlas, como parte de sus rutinas naturales.
Cada vez con mucha mayor precisión, la inteligencia humana afirmada en nuevos algoritmos matemáticos de precisos refinamientos, parecen ir a la caza de esos inciertos, químicos, físicos, biológicos, tal que lo teóricos de la digitación matemática, podrían sorprendernos más depronto que lo imaginado. con hallazgos de explosivos descubrimientos biológicos tales como las proyeciones biológico-sociales futuristas, lo mismo que el descubrimiento de la historia precisa del pasado, retroproyectado.
Nos parecerá esta afirmación como teoría cuasi-divinal, odiosa, profana, abominable, impía, pero no descartable, digamos que, a tan cortos plazos como apenas un par de deécadas. La realidad virtual. La fantasía poética convertida en versos vivos, la reconstrucción poética de la realidad, puede estar conviviendo desde ya con nosotros, en nuestro presente, a lo mejor lo sabrán los dioses que nos conducen o imaginamos.
A lo mejor como creadores artísticos de dioses, logremos descubrir y descifrar nuevas teorías burladoras de las incertidumbres cuánticas y sus espirituosos y vaporossos hallazgos digitales, moleculares y subatómicos.