sábado, 20 de abril de 2013

MI PECHO SU ALTAR




Olas de ternuras delicuescen desde el brillo negro tras la luz de sus pupilas

Atisbadas de gracias hormonales, danzantes como caderas adolescentes 

El ritmo del músculo sobresalta bajo el pecho tensado de botones en flor

Vaciadas en saliva suenan breves palabras mojadas de esa viscosidad sensual    

Así los minutos de la noche en fuga escurren por las corrientes de mis ansias

Peregrinas, desesperadas, resueltas en la sublime incertidumbre del miedo

Adolescencia vertida al abismo cuando la frustración flaquea mis rodillas

Al influjo del requiebro retenido, escapa en los enigmas del pase de serpiente

Pasea  la manzana no servida, asoma la tentación del dios de los infiernos

Y resuenan las estridencias mortales de las flaquezas, cobardía ante la muerte

Ante el macho de la noche que ruge su reinado sobre los límites del susto

Retiro mis apuestas contra el escarnio de la derrota, humillo hacia el suelo

En oración de retirada, bajo las picas del desconocido vencedor de la luz

Sin ruegos a Dios ni a la virtud de los hombres lanzo campanas de guerra

Ya desde mi cuerpo crecerán laureles y palmas, sobre mi pecho su único altar.

jueves, 18 de abril de 2013

ESTALLIDOS DE AMOR




Mis versos van y vuelven del cansancio a la espera hasta el doler del silencio en mi alma

Soportada entre muros y dinteles de utopías medidas a la precisión de tu silueta y nombre

Imagen y palabra, pensamiento y cuerpo, carne para razón de mis sentidos, cruz del amor

Lumbre votiva del cerco eterno cerrado en derredor de nuestras vidas, historia del triunfo

Determinada en los azares de mi dicha correspondida por el mismo escultor de los cielos

Viva en tu existencia, en los colores de tus gracias relucidas en tonos musicales de tu voz

Ave de trinos purificados en resonancias y eufonía en pentagramas de la perfección sideral

Alimento eres para el pensamiento de imaginación inagotable, mi espíritu servido a tu mesa

Al capricho sin manchas de tus órdenes, lienzo del portal para la reina y su dulce voluntad

Matriarca de sueños relictos, diluidos entre humores y feromonas difuminadas en bendición

Mientras nuestros días desaguan en versos veniales, fantasías y brisas, nubes y silencios

Entre vigilias escuchamos las sutiles preguntas sin respuestas, densas, de carnes y deseos

Iluminadas por rayos de razones, verdades eternas, sentidos divinos y estallidos de amor.