VENCIDOS BAJO LA DICHA Y EL PLACER

Al primer abrevadero colocado en el trayecto de nuestro viaje

Arribaremos juntos con nuestras alforjas repletas de ilusiones

Fantasías sin números de un poema aun sin conocida escritura

Canto marcial de triunfo sospechado desde el mismo momento

Cuando sudores de mar, la noche de poesías y brisas inconexas

Accidentaron la casualidad de nuestro encuentro sin retornos

Un pretexto, excusa rosada, velado rito fueron las palabras

Hilamos la breve distancia de encuentros con tu entero poema

Hilandera y bordadora, bordada en su misma seda de reina

De contornos espirituales sagrados y humedad en los labios

Para exacerbar el pecado de mis lascivias del más puro fervor

Religión de paz turbada ante la aguda lanza erótica de sus ojos

Arden sus manos como leña de verano, solo imagino sus besos

Quemando mi lengua y paladar al calor de su licor azucarado

Barboteo que espera medir el fragor de su entrega y mis deseos

Volverán sus colores las hojas del otoño a volver ser primavera

Sinfonías salvajes sin límites ni arreglos, testigos ni promesas

Amor adolescente inundado de humores y célicos espasmos  

Sortearemos por encima de los astros y sus principios siderales

Cada gesto de hablar mudo, será verso de este sin final poema

Iniciado desde el pensamiento y la profecía de nuestra infancia

Unidas por los vientos y lluvias invisible de unas semejanzas

Designada por los complejos enigmas de los astros infalibles

Fuerza y razón de lo determinado como súbditos del amor

Nos amaremos vencidos bajo la dicha y el placer de sus fuerzas.