jueves, 23 de enero de 2025

EL PADRE JESÚS CASTRO Y LOS HIPÓCRITAS

 

El más influyente vocero y conductor destacado de la Congregación de La Fe Católica en República Dominicana, hoy, como mentor connontado de toda la mística sociedad judeo-cristiana desde la que proyecta y cubre con su cultira moral, practicamente la generalidad de la ciudadanía dominicana, se ha pronunciado, durante la celebración de la física  y protocolar tradición ceremonial dedicada a la advocación de la Virgen de la Altagracia, tenida por el publo dominicano como "Matrona de la Nación Dominicana", acto encabezado presencialmente por el Presidente de La República. 

Aprovechó la sin par y mediática ocasión para reclamarle a las autoridades de El Estado Dominicano, lo que, en palabras expresas del propio influyente conductor social, sería un comportamiento propio de "doble moral", el asumido por los dirigentes políticos nacionales, el exhibido comunmente, al condenar la presencia en el país, de la masiva asistencia de inmigrantes  que llegan a esta República Dominicana, a laborar en los distintos puestos de trabajo como obreros generadores de plusvalía, responsables, en grandísima medida del progresismo económico que se reconoce en todos los escenarios de estimaciones e inversiones del mundo financiero, del capitalismo local y el internacional. 

La "Doble Moral", referido así, con ese místico apodo social, trata de la mentira y el mentirosismo propio de los agentes intelectuales dominicanos que dedican sus esfuerzos mediáticos, moralísmicos, propios del aguajerismo político y el estupidismo intelectual, a renegar la correspondiente verdad, la insoslayable realidad que nos dan a conocer las cuentas numéricas, la contabilidad económica y social,  que fija esa realidad innegable de que es la mano de obra semiesclavizada, servida por la obrería haitiano-dominicana, la gran responsable, sobre cuyas espaldas, sudor y sangre. 

Es aquí donde descansa ese crecimiento disparado del sistema económico del que se nutre  ese crecimiento dominicano, ventajosamente aprovechado desde la obrería abundantemente ofrecida, gracias a la semiesclavitud a la que el capitalismo mundial ha sometido, sabiametnte, inteligentemente, desde el punto de vista de la lógica del capitalismo que se nutre imprescindiblemente, de la mano de obra, cuanto más desesperada más barata, como es, para todo el mundo, su base definidora de este sistema. 

Lo que ha publicado el obispo Jesús Castro, es solo un resumen puesto en un par de palabras inmensamente poderosas, unicas por tratarse de ese contenido que deja "en sus cueros", a sol de mediodía, cualquier otra definición del capitalismo y sus suscedanesos misticismos, sus embustes, aguajes y aguajeros.

No hay comentarios:

Publicar un comentario