Te llamo en tres nombres, tres veces me lleno de tus nombres
Día, tarde y noche los metales trasponen sonidos en
sinfonías
Tus nombres, composición del libreto de esta ópera sublime
Sobreponen los pentagramas al silencio de tu cada vez
callada
Voz cerrada en la densidad de mis tatuajes, defectos y pésames
Marcas de mis espaldas, penitencias sin redenciones ni
descargos
Un hálito de paz, libertad, respuesta concedida, entregada y real
Despierta el acento de tu alegría cuando hablan y ríen tus ánimos
Baño de bendiciones, brisas y luces, inundación fresca del alma,
Las palabras en tu voz, hija mía, son canto del amanecer el día
En la escena de esta obra de entera magnitud en esta ruta vital
Teatro de la perfección concebida, obra magnifica de sólo Dios
Hija preferida eres, dinamia perfecta, ritmo divino de la vida,
Por la piel de tus días se escurre mi nombre extendido
Intro-tallado caoba de cada poro, cada célula de tu génesis, tu filia.
Eres mi propia mitad en cada respiro de tu rebeldía, tu alma
Soy peso vivo de tu propia suerte, de tus codos y rodillas
Hasta el bien de tus humores cuando rezas, somos hija y padre..
Día, tarde y noche los metales trasponen sonidos en
sinfonías
Tus nombres, composición del libreto de esta ópera sublime
Sobreponen los pentagramas al silencio de tu cada vez
callada
Voz cerrada en la densidad de mis tatuajes, defectos y pésames
Marcas de mis espaldas, penitencias sin redenciones ni
descargos
Un hálito de paz, libertad, respuesta concedida, entregada y real
Despierta el acento de tu alegría cuando hablan y ríen tus ánimos
Baño de bendiciones, brisas y luces, inundación fresca del alma,
Las palabras en tu voz, hija mía, son canto del amanecer el día
En la escena de esta obra de entera magnitud en esta ruta vital
Teatro de la perfección concebida, obra magnifica de sólo Dios
Hija preferida eres, dinamia perfecta, ritmo divino de la vida,
Por la piel de tus días se escurre mi nombre extendido
Intro-tallado caoba de cada poro, cada célula de tu génesis, tu filia.
Eres mi propia mitad en cada respiro de tu rebeldía, tu alma
Soy peso vivo de tu propia suerte, de tus codos y rodillas
Hasta el bien de tus humores cuando rezas, somos hija y padre..
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