RESPUESTAS A QUILVIO VÁZQUEZ

Las Religiones deben respetar.

"...deben respetar..." (Quilvio Vázquez)

" ..el deber ", epístome conceptual del cual se genera su extensión gramatical: "los deberes"...,implica una forma de compromiso "moral". Desde el mismo instante que nos adentramos en ese mar de inmensa complejidad conceptual, humana, biológica y socialmente tan extendido como difuso, confuso y profuso en cuanto a compromisos intelectivos, ya obliga a cualquier filósofo, pensador o investigador social a escudriñar con firme seriedad la ruta elegida para intentar establecer, cuando menos un punto de definición que pudiéramos llamar o considerar, francamente, serio. La "....moral", asiento del " el deber", parte, precisamente del material humano más subjetivo. Parte de lo materialmente inasible. de la imaginación resultante, -hasta donde alcanzan los conocimientos más profanos como son a los que alcanzo yo mismo a comprender sobre mi propia composición material-, del hecho material sometido a continuas transformaciones, infinitas e ilimitadas, en la expresión de la materia que conforma la naturaleza cósmica. Así vistas los giros intelectivos de la materia, los deberes, como resultado de los trazados morales, devenidos de la evolución biológica del ser humano, no pasan de ser otra cosa más que formas estructurales de convenios sociales que siguen distintos cursos mediados por los afanes biologicistas que impulsan en el sentido de la preservación de esas estructuras materiales armadas de distintos andamios naturales. Así arribamos a definir, deberes espirituales, deberes antropológicos, deberes sociales, deberes políticos, deberes religiosos, deberes éticos, deberes legales, deberes humanos, deberes, deberes failiares...etc...De las distintas convenciones humanas descienden entonces deberes tan firmes que terminamos convirtiéndolos en "obligaciones legales ",  Mientras esto no ocurre , muchos se quedan en los llamados deberes morales de los que se extienden las formas religiosas, éticos, familiares y sociales en general. Nuestras imposiciones insoslayables, pues, quedan limitadas a las convencionadas socialmente como "leyes de El Estado", o, por lo menos son los que compromenten nuestras libertades físicas y sociales más poderosas. Los demás "deberes", como bien puede considerarse el traído por nuestro respetable contertulio y amigo, Ing. Quilvio Vázquez, se limita a un deseo convencionado básicamente consigo mismo, sobre todo, siendo que lo limita a lo que el refiere en  su forma verbal, al "respeto", de hecho, otra generalización, que, casi por igual, nos remite a extensísimas formas de subjetivismos idealizados, pensados, imaginados de muy distintas formas culturales y emocionales, de difícir concentración conceptual.




"..La Religión solo pretende ser una guía moral,..."  (QV)

Si, es así, o, por lo menos, igual lo entiendo y por ello no objeto sus prácticas, cuando no exceden las convenciones y compromisos formalmente enmarcados como Ley del Estado que es la forma de convivencia que nos damos.

 "pero en realidad su meta es el control de la Sociedad.." (QV)

Si, es así. Es una meta natural, convencionada como ley de Estado por tratarse de esa lucha natural trazada por los enigmas de la evolución material biológica. Nada que objetar, por tanto.


"La Religión manipula los principios elementales de la naturaleza humana, y solo enseña que la maldad es una tendencia inevitable en la conducta humana." (QV)

De nuevo nos hallamos con la subjetividad anterior, implicada esta vez, en otro epístome, tan poderoso e interesante como el primero considerado. Esta vez nos referimos a "la maldad ", desinencia semántica de "lo malo". Este signo repta concomitantemente con el de "lo moral", pero en sentidos opuestos, uno empujando contra el otro, por tanto, iguamente subjetivo, convencional, sin calidades materiales definidas, sin más sentido que el de oponerse, precisamente a las calidades del otro, de modo que apenas dan para luchar entre si como parte de un espectacular compromiso laboral de responsabilidades mutuas.


"Y por esta causa olvida que la Conciencia es un tribunal,..." (QV)

Si, es cierto, comparto con Quilvio este aserto santificado por los tribunales del "Santo Oficio". Es un concepto así reconocido en en las prácticas moralistas, centradamente subjetivas, sin valor material, más allá de esa construcción fantástica, magico-religiosa. Quilvio sella con aserto su fe religiosa, fundada en los juicios y sentencias de la " consciencia", construcción, eminentemente patentada por la fe cristiana, que se nos muestra como una batallón duedes en taresas permanentes no descansan jamás laborando en las ricas minas del pensamiento y la Consciencia del Ing. Quilvio. 

 "  La Conciencia es unidireccional, su camino es el bien y solo transita en esa Vía..." (QV)
De nuevo asoma como contrapartida obligada a aterrizar, la contraposición especular, el gemelo siamés, inseparable,  de "El Mal". Es "El Bien ". Logicamente, El Bien Moral. Sin dudas, no se precisa ningún argumento adicional. Son estas calidades sobre "El Bien y El Mal", las que certifican la salvación moral de la divinal Consciencia de Quilvio.



"La Conciencia es pura, libre del Mal, cuando no es contaminada con la mentira, el odio y el rencor." (QV) 

" el mundo necesita el perdón para salir del rencor y el odio "..(Papa Francisco)

La Religión persigue a todos aquellos que buscan el bien dentro de sí mismo,  y dicen que nada humano le es ajeno a su Dios, y que el hombre es así de malo, porque no atiende cuando Dios les habla a través de sus pastores.

Definitivamente no hay nada justo en el cristianismo y su perverso Dios, pretenden justificar todas las atrocidades de la naturaleza, en un Dios, que no tiene como cambiar el curso de la naturaleza.

Una mujer es Embarazada, en una relación natural, un proceso dónde un Óvulo es fecundado cuando entra un espermatozo en él.
Nada ni nadie puede determinar, en ese proceso natural, las condiciones de ese encuentro que crea un Embrión.
Gracias a los últimos descubrimientos de las ciencias, se ha logrado ver el proceso que sigue ese embrión. 

Ahora tenemos conciencia de que en ese proceso no interviene ningún Dios, ni determina si el proceso es correcto o no.
Pero en caso de que ese Dios exista sería el más irresponsables, si obliga que esa mujer traiga a la luz un ser, que el formó irresponsablemente.

Y todavía más absurdo sería quitar el libre albedrío a una mujer que no quiere parir, a una criatura que se engendró con deformaciones, gracias a Dios.

Pero a mi no me extraña, ese dictadura sobre la mujer y sobre los niños, cuando se trata de un cristiano, porque su biblia está llenas de ejemplos de la poca importancia que les da ese Dios, al niño y a la mujer.

La republica de Chile acaba de revelarse contra el DIOS CRISTIANO y permitió a la mujer decidir de acuerdo a su conciencia.

Pero es una decisión en contra de la manipulación religiosa, porque lo correcto es que las religiones orienten a sus mujeres, para que respeten la ley de su Dios, de parir sin importar las cansecuencias.

Naturalmente que las religiones quieren manipular a toda la sociedad, estableciendo sus creencias por encima de todo el mundo.

Ahora debemos felicitar a Chile, que demostró a las religiones que la libertad de Conciencia  de una mujer no puede ser reprimida por una religión.
El aborto es un gran acto de amor de la mujer y su conciencia.

Si la mujer sabe que su útero no formó una criatura normal, debe ser una desicion de ella y su Conciencia abortar.

Si las religiones creen que Dios formó esa criatura así,  debían de exigirle a su Dios, que una mujer tiene el mismo derecho a ser juzgada el día del Jucio final, cuando todos acudan antes él, para explicar su conducta en vida.

En realidad es una decisión de los seres vivos, hacer su vida en una sociedad de amor y respeto.
No existe ningún Dios, que pueda obligar el hombre a hacer cosas malas, pero creamos un Dios, PARA JUSTIFICAR TODOS LOS MALES.