FRANK PEÑA Y EL VALOR DE LAS HISTORIAS BÍBLICAS

Una vez más me referiré a lo expuesto por Frank Peña con respecto al valor de los escritos bíblicos. Reitero y ratifico lo expresado ya antes sobre este asunto. Las historias bíblicas contienen un valor extraordinario en como relato de las tradiciones y la historia de los pueblos judíos en general. Si bien muchos de sus relatos resultan ser fantasiosos, literatura artística bellísima, que, sin embargo, contraen en su contenido la verdad de las tradiciones e historia de esos pueblos, aun si la exactitud material, matemática, que algunos puristas, obsesionados con la exactitud aritmética, exigen. No se trata de mentiras simplemente viciadas, sino de fantasías literarias, relatos imaginarios de gran valor que, por encima de su veracidad a la medida de varas, cuentas y fechas, revelan ampliamente, gran parte de la antropología social de la época. Gente estudiosa, con dominio del método científico deductivo e inductivo, como Berenice Ludovica y Braulio Rodríguez, no deben quedarse en silencio. Quedan moral e intelectualmente obligados a poner sus acentos respectivos sobre los comentarios del Dr. Frank Peña y las observaciones que hago con la finalidad de contribuir a aclarar y edificar sobre el valor real del contenido expreso en La Biblia. Claramente, quienes la leen como un documento notarial certificado, letra por letra, es más que obvio que resultan estar afectados de una entre dos posibilidades: sinvergüenzas los unos e ignorantes los otros. Los ignorantes merecen nuestras consideraciones y respeto, pues no son culpables de sus deficiencias formativas, pero los sinvergüenzas y maliciosos que conociendo la verdad, utilizan la ignorancia de los otros para aventajar beneficios mundanales, merecen nuestros rechazos, son abominables por perversos. Pero, una vez más lo afirmo: el valor de La Biblia como documento para ser interpretado, es una fuente de inconmensurable importancia y como relato literario, poesía y demás, es impecable, bellísimo, insuperable ! Considero al documento ensayo de Frank Peña muy didáctico y advertidor, pero demasiado aritmético en sus exigencias, inflexiblemente jurídico.